Según la medicina tradicional china el dolor y la enfermedad se originan a consecuencia de un desequilibrio entre las dos fuerzas que rigen el cuerpo humano, el ying y el yang; y este desequilibrio bloquea el flujo de la energía vital.
La acupuntura consiste en insertar una serie de agujas muy finas en la piel del paciente, a distintas profundidades, para estimular puntos específicos del cuerpo, con el fin de restaurar el flujo y equilibrio de energía en el interior del organismo.
Existen 2.000 puntos de acupuntura conectados por’meridianos’ (canales que distribuyen la energía por el cuerpo), cada uno de los cuales se corresponde con un órgano o sistema orgánico.
Todavía no se conoce con exactitud cómo funciona la acupuntura, pero se ha comprobado que actúa sobre el sistema nervioso y estimula la liberación de endorfinas (sustancias con capacidad analgésica) y la actividad de las células del sistema inmunológico.